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Artritis y Aromaterapia, tratamientos

Desde hace siglos se sabe que determinados aceites aromáticos destilados de las plantas, poseen notables propiedades curativas. La mayoría conocemos la aromaterapia como un tratamiento de belleza y relajación. Los productos de aromaterapia se hallan fácilmente en forma de aceite de masaje o de baño.

Los antiguos egipcios, con su amor por la sensualidad y los perfumes, se consideran los creadores de la aromaterapia. Utilizaban aceites aromáticos para dar masajes, curar y embalsamar. Las momias egipcias deben su extraordinario estado de conservación a los poderes de las esencias de las plantas. De hecho, los arqueólogos han identificados aromas de madera de cedro y mirra en los vendajes de momias de hasta 3.000 años.

El antiguo arte revivió en Francia en la década de 1920, cuando un químico, René Gattefossé, redescubrió las grandes propiedades antisépticas de ciertas plantas aromáticas. Mientras trabajaba en su
laboratorio, se quemó la mano tras una explosión, y la sumergió en un cuenco que contenía esencia de lavanda. Cattefossé se quedó atónito por la rapidez con que se curó la herida. En consecuencia, decidió investigar seriamente las propiedades medicinales de los aceites esenciales. Sus descubrimientos fueron publicados en 1928 en un libro llamado Aromaterapia.

La Aromaterapia en la actualidad

El fundador de la aromaterapia clínica moderna fue Jean Valnet, un médico francés y cirujano militar que utilizaba aceites esenciales para tratar las quemaduras y heridas de los soldados durante la Segunda Guerra Mundial.

El doctor Valnet descubrió que ciertos aceites tenían el poder de aliviar problemas psiquiátricos, como el trauma de guerra, provocados por la contienda. El doctor Valnet fue uno de los primeros médicos en utilizar aceites esenciales por vía interna y, en Francia.
la aromaterapia es ampliamente utilizada en la actualidad por los médicos convencionales. El poder de ciertos aceites esenciales para aliviar los dolores artríticos y reumáticos se descubrió accidentalmente, como un inesperado, aunque bienvenido, efecto secundario del tratamiento con esencias de plantas.

La bioquímica austriaca Marguerite Maury fue una de las primeras terapeutas en emplear la aromaterapia como tratamiento holístico para cuerpo y mente. Su trabajo se inspiró en Gattefossé, pero ella añadió una técnica de masaje especial que consistía en aplicar aceites esenciales a lo largo de los centros nerviosos de la columna.

Aunque Maury trataba sobre todo a clientes adinerados que no buscaban más que un tratamiento rejuvenecedor, algunos empezaron a sentir espectaculares mejorías en sus dolores artríticos y reumáticos. Esos efectos duraban semanas, o incluso meses después de la finalización del tratamiento.

¿Que son los aceites esenciales?
Son componentes aromáticos líquidos y volátiles de las plantas olorosas. Estos líquidos se encuentran en diferentes partes, según la planta: en los pétalos (rosas), en las hojas (eucalipto, laurel), en la madera, madera de sándalo) o corteza, en el fruto, limón, naranja), en las semillas (comino, pimienta negra), en las raíces (sasafrás), en los rizomas (jengibre) o en la resina (pino).

A veces, las sustancias aromáticas se encuentran en más de una parte de la planta. La lavanda, por ejemplo, produce aceites aromáticos tanto en sus flores como en sus hojas. El naranjo produce esencias aromáticas en las flores, las hojas y el fruto. Las plantas producen estos aceites sólo para su propia supervivencia. Algunos aceites influyen en el crecimiento y la producción, otros atraen a los insectos o repelen a los depredadores, y otros tienen por objeto proteger de enfermedades.

Los verdaderos aceites de aromaterapia suelen ser caros por la gran cantidad de pétalos, hojas o raíces que se necesitan para producir una pequeña cantidad de aceite esencial. Los aceites están muy concentrados (nunca deben utilizarse directamente sobre la piel) y una pequeña cantidad dura mucho tiempo.

Los análisis de laboratorio muestran que los aceites esenciales poseen una química compleja. Contienen cientos de elementos diferentes, y muchos de ellos no han sido analizados por completo.

Curar con aceites

¿Cómo alivian estos aceites la artritis? A lo largo de los siglos se ha descubierto que los aceites esenciales poseen una serie de propiedades terapéuticas. Al tener como objetivo fundamental la supervivencia de la planta, todos son antisépticos. Además, algunos poseen propiedades antivíricas o antiinflamatorias. Los aceites favorecen el proceso natural de autocuración del organismo. Actúan directamente sobre el sistema nervioso central, y cada aceite posee propiedades diferentes.

Algunas esencias son relajantes y otras estimulantes. Hay aceites con capacidad para normalizar los síntomas del organismo. Por ejemplo, el ajo, que suele tomarse en píldoras más que como ungüento de masaje, puede reducir la hipertensión y elevar la tensión baja.

Los aceites esenciales poseen la capacidad de aliviar la artritis a diferentes niveles. En primer lugar, los aceites adecuados pueden calmar la inflamación y reducir el dolor. Reducen la tensión muscular, que puede acompañar al dolor de la artritis. En segundo lugar, se produce un notable efecto cuerpo-mente, ya que muchos aceites contribuyen a aliviar la ansiedad, la depresión y la ira.

El masaje de aromaterapia favorece la relajación, algo complicado de lograr cuando se sufre dolor, rigidez o inmovilidad debido a la artritis. Un masaje con aceites esenciales también nos hace sentir mimados, cuidados y nos alivia, todo lo cual favorece un estado mental positivo que ayuda enormemente en el proceso curativo físico.

Como sucede con otros tratamientos complementarios, la aromaterapia no puede curar la artritis, pero puede aliviar o mejorar su estado. Dado que los efectos pueden ser fuertes, el aromaterapeuta debería ser alguien formado para tratar a los artríticos. Un masaje de aromaterapia debería considerarse un tratamiento médico, más que de belleza.

El factor estrés

Las aromaterapeutas piensan que los aceites esenciales afectan á nuestra salud sobre todo a nivel mental y emocional. Las sustancias químicas de los aceites influyen directamente en nuestro cerebro para estimular el pensamiento positivo y el optimismo. El alivio del estrés pone en marcha el proceso curativo y alivia cualquier problema físico debido a la acumulación de estrés y tensión.

Si le interesa el uso de aceites esenciales para tratar la artritis, es aconsejable acudir en primer lugar a un aromaterapeuta cualificado, quien recomendará el régimen holístico adecuado para su problema, estilo de vida e inclinación particular. Los colegios profesionales pueden ponerle en contacto con arnmaterapeutas cualificados.

ACEITES PARA LA ARTRITIS

Los siguientes aceites y esencias de aromaterapia han demostrarlo su utilidad en el alivio del dolor y la inmovilidad de la artritis.

Caieput, Clavo, Camomila, Enebro, Cilantro, Lavanda, Ciprés, Limón
Mejorana dulce, Tomillo dulce, Olíbano, Pimienta negra, Salvia.

Los aceites se comercializan en frasquitos marrones o azules. Siempre deben mezclarse con un aceite vehicular, de oliva, girasol a soja, antes de utilizarse, y jamás deben aplicarse directamente sobre la piel. Al ser los aceites extremadamente volátiles, los frasquitos deban guardarse siempre cerrados. Los tratamientos de aromaterapia, ya mezclados, para aplicar directamente sobre la piel. se venden en botellas con la etiqueta “aceite de masaje ”.

Tratamiento para la artritis

Los siguientes tratamientos de aromaterapia son adecuados para un tratamiento casero y seguro de la artritis.

1. Humedezca una pequeña toalla en una palangana con agua muy caliente que contenga 15 ml (1 cucharadita) de vinagre de sidra, dos gotas de aceite de pino, dos de ciprés y una gota de aceite de lavanda. Aplique estas compresas por la mañana y por la noche sobre las zonas afectadas. Después, aplique aceite de oliva o de nuez y mantenga la zona caliente.

2. Prepare una emulsión con un champú suave y sin perfume que contenga una gota de aceite de pino, otra de enebro y otra de ciprés. Llene la bañera de agua caliente y añada la emulsión. Sumérjase en la bañera tanto tiempo como sea posible. Después, envuélvase en un albornoz caliente y descanse sobre la cama durante 10 minutos.

Aceite de pimienta para masaje
Este aceite es muy calorífico y puede ayudar a aliviar el dolor de la artritis. Hace falta:

10 ml (2 cucharaditas) de aceite de soja, 2 gotas de aceite de germen de trigo, 3 gotas de aceite de pimienta
Mezcle los ingredientes y, con un masaje, aplíquelo a la zona afectada. Después, cubra esa zona con una compresa caliente.


Aunque los tratamientos de aromaterapia pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación de la artritis, el alivio no está garantizado. Éstos ayudarán a algunas personas más que a otras. Funcionan mejor junto con una dieta antiartritis y un régimen globalmente sano y holístico. Los aceites caloríficos pueden sensibilizar la piel tras el tratamiento. Para calmarla frótese con aceite de soja.